Fuente: Terra Perú
Michelle Obama cumplió 50 años y el presidente de los EE.UU. se encargó de agasajar a la primera dama llevándola a un evento deportivo que les dio la oportunidad de relajarse y olvidar sus problemas durante unas horas, aunque se obtuvieron fotografías de la pareja en plena discusión.
Los Obama son una de las parejas más asediadas del mundo, pero es poco común encontrar a un invitado de la fiesta que no fue nada discreto al observarlos con particular interés.
Después de todo, la última vez que fueron fotografiados juntos, en la ceremonia en memoria de Nelson Mandela, la Primera Dama estuvo observando, no muy contenta, cómo su esposo posó para un “selfie” con la Primer Ministro danesa , Helle Thorning-Schmidt.
De hecho, si los tabloides estadounidenses están en lo correcto, la relación de la pareja de oro de Washington se enfrenta a problemas que van mucho más allá de unas miradas.
Bajo el titular “El divorcio de Obama”, el National Enquirer afirma que su matrimonio de 21 años se ha disuelto a lo largo de una serie de peleas que fueron ocasionadas por el incidente en la ceremonia de Mandela y, mucho más escandalosamente, a raíz del supuesto descubrimiento de la Sra.. Obama de que los guardaespaldas del Servicio Secreto habían encubierto la infidelidad de Barack por mucho tiempo.
Es una acusación que la Casa Blanca se ha negado a comentar, aunque después de los escándalos pasados como las realizadas por Bill Clinton, los estadounidenses estarían bastante menos optimistas acerca de cualquier actividad extra-marital al mismo estilo del presidente Francois Hollande.
La señora Obama, afirma el Enquirer, tiene la intención de permanecer al lado de su esposo hasta que su presidencia haya finalizado, momento en el que Barack se trasladará de nuevo a Hawaii, donde creció, mientras que ella se quedará en Washington con sus hijos.
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